Este curso ha estado lleno de risas, canciones, excursiones, historias… y también alguna que otra lágrima de emoción (¡o de rabieta!).
Y detrás de todo eso, ha estado él o ella. Escuchando, acompañando, enseñando, animando… y haciendo magia con cada peque.
Ahora que el curso llega a su fin, es el momento perfecto para decir: gracias.
|