Los cortacéspedes a batería son una alternativa cada vez más común, gracias a la constante evolución de la tecnología que los hace más potentes y eficientes cada año.
Uno de sus puntos fuertes es, sin duda, su facilidad de uso: no requieren conexión a la red eléctrica ni combustible, por lo que resultan extremadamente cómodos y están listos para funcionar en cuestión de segundos. Además, casi no necesitan mantenimiento. Aunque la potencia suele ser inferior a la de los modelos de gasolina, estas ventajas hacen de los cortacéspedes a batería sean la opción ideal para muchos usuarios.